lunes, 23 de agosto de 2010

La estupidez media, de la clase media

*Por Esteban Santantino

// Necesito compartir con ustedes algunos fragmentos del texto de un mail que me llegó por cadena y que es, dolorosamente, la expresión de un pensamiento cada vez más difundido entre nosotros.

El mail con el nombre “Reportaje a un argentino... diferente” simula una carta escrita por una persona simple y sencillamente… pobre. Y comienza de la siguiente manera:

Hola, permítanme presentarme... soy un negro habitante del conurbano bonaerense, aunque bien podría estar viviendo en alguna otra villa. Esa cuestión no importa. Le pedí la pluma prestada al escribiente, dado que soy bastante bruto para escribir porque no me eduqué bien y tampoco me interesó demasiado hacerlo y por supuesto, no lo pienso hacer.

No he cumplido muchos años de vida pero ya tengo 5 pendejos, por los cuales, gracias a usted, cobro $ 900 en concepto de Asignación Universal por Hijo. A eso hay que sumarle mis $ 1.000 por un Plan Argentina Trabaja, más los $ 150 de mi señora por un Plan Trabajar que se multiplica dado que vivo con mis suegros que tienen otros 2 Planes iguales. Lo que suma en total un importe de $ 2.350 por mi hogar. Todo eso me viene absolutamente gratis, ya que ninguno trabaja, y lo cobro alegremente en los cajeros.

Alguna changuita me hago cuando el puntero peronista me convoca y voy a vociferar a la vía pública en apoyo a Cristina, con un palo o un fierro amenazadoramente… de trabajar, nada. No trabajo. ¿Para qué si con lo mencionado me alcanza y me sobra?

En la heladera tengo vinos y cervezas. En una cajita guardo el paco y la merca. De la alimentación de los pibes, se ocupa la escuela pública y si alguna maestra se atreve a querer disciplinarlo, allí estaré yo para pegarle una trompada.... ¿quién se cree que es? A veces los llevo a las marchas para que vayan absorbiendo la cultura piquetera y los uso como escudos humanos si los ratis se ponen pesados.

Otras veces me pega mal la merca y salgo a afanar. Prefiero como víctimas los pendejos que salen de la escuela o los jubilados, porque no saben defenderse. El tema es que no puedo trabajar en blanco porque pierdo los planes sociales. Las jodas comienzan los viernes, sacó los parlantes, hago sonar pibes Chorros" o "El Polaco" y comienzo a intoxicarme. Asado, todos los fines de semana y por la resaca los lunes duermo hasta tarde.

Me río de los imbéciles que trabajan y pagan sus impuestos porque gracias a ellos yo puedo seguir adelante con mi cómoda vida… Este sistema es un paraíso para mí y cada día somos más, gracias a que no hacemos otra cosa que "darle" a las negras.

Si el creador de la bandera supiera que todo su trabajo sólo sirvió para que yo existiera, se volvería a morir. ¡Qué me importa! Además ese Belgrano era rubio y tenía ojos azules y me importa lo mismo que me importas vos. Si sos blanco, te odio más. Por eso, cada vez que me mires de costado y arrugues la nariz, cada vez que una negra embarazada esté a punto de parir, cada vez que te corten una calle o una vía, o te ensucien, te pinten la casa, te afanen, te pisen, te escupan, tenés que recordar que yo existo gracias a vos y a tus impuestos...

Es impresionante el nivel de estupidez de quien sea que haya escrito este texto, ya que todo su argumento está basado en un asistencialismo exacerbado del Estado para los sectores populares y sin embargo si consideramos que el ingreso del hogar mencionado es de $2.350.- y lo dividimos por los 9 miembros de éste hogar, vemos que deberían poder lograr una “cómoda” existencia con $260.- por mes. ¿Qué clase de dignidad se compra con eso? ¿podrían ustedes hacer algo más que apenas subsistir con $260.- por mes?

El sentido de compartir esto con ustedes responde a la necesidad de salir al cruce de tanto racismo, de tanta ignorancia, de tanta violencia e incontinencia verbal que no son otra cosa más que la expresión de posiciones cómodas desde donde se dicen barbaridades inhumanas y que continúan alimentando una fragmentación social cada vez más profunda, cada vez más triste…

Pero claro, repetir estupideces sin sentido resulta muy útil para ocultar responsabilidades mucho más complejas y, sobre todo, es mucho más fácil escupir palabras que denigran a terceros antes que tomarse la molestia de formar un pensamiento propio, coherentemente fundamentado y por ello, verdaderamente libre. Mientras tanto seguiremos estando presos, de tanta ignorancia…

1 comentario:

Matias dijo...

Me llego este email por un amigo. Busque bastante en la web, sobre todo me interesa saber la fuente del texto, cosa q no voy a lograr. Sobre todo quiero destacar lo afin que estoy a su comentario, dentro de todo lo que lei es la opinion que mas me identifica.
Lo que realmente me duele es la actitud de amistades en tomar la opcion mas facil y discriminar.En reunines doi mi opinion y siempre fui tachado de comunista, zurdo y demas calificativos, sin ser realmente escuchado. Puedo agregar en mi humilde opinion, que clase media toma esta postura ya que no analiza cual es la verdadera raiz de todos los problemas.